Renault se estrella: despide a un trabajador de baja y acaba pagando más de 60.000 €

¿Te pueden despedir por salir a comprar el pan o lavar el coche mientras estás de baja? Renault lo intentó, pero la jugada le ha salido cara: el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha declarado improcedente el despido de un trabajador que, durante su baja médica por lumbalgia, fue seguido por un detective privado y grabado haciendo vida normal.
El caso:
- El empleado, con más de 20 años en la empresa, cogió la baja en junio de 2023 por una lumbalgia aguda.
- Renault contrató a un detective que le grabó conduciendo, paseando, haciendo compras y hasta lavando su furgoneta.
- La empresa alegó que esas actividades demostraban que podía reincorporarse y que estaba incumpliendo la buena fe contractual.
¿Por qué la justicia le da la razón al trabajador?
- Los informes médicos recomendaban precisamente ejercicios suaves, paseos y actividades cotidianas para mejorar la espalda.
- Las tareas grabadas no suponían un esfuerzo incompatible con la recuperación ni demostraban que pudiera desempeñar su puesto en Renault.
- El tribunal recalca: para justificar un despido durante la baja, hay que probar que las actividades dificultan la curación o evidencian plena aptitud laboral. No era el caso.
¿Qué consecuencias tiene la sentencia?
- Renault debe readmitir al trabajador o indemnizarle con 61.632,55 euros.
- La sentencia sienta un precedente claro: hacer vida normal durante una baja médica no es motivo automático de despido, siempre que no se incumplan las pautas médicas ni se ponga en riesgo la recuperación.
¿Qué deben tener en cuenta empresas y trabajadores?
- Contratar detectives y vigilar a empleados de baja no siempre justifica un despido.
- La clave está en si las actividades realizadas son compatibles con el diagnóstico y la recuperación.
- Los informes médicos y la proporcionalidad de la sanción son fundamentales en cualquier conflicto de este tipo.
En resumen: La justicia protege el derecho de los trabajadores a llevar una vida normal durante una baja médica, siempre que respeten las indicaciones sanitarias. Las empresas deben hilar fino antes de sancionar por este motivo, o pueden acabar pagando caro el error.